Las facetas son las articulaciones que unen a cada vertebra con la de arriba y con la de abajo; por lo tanto, puede presentarse dolor de origen facetario a nivel cervical (cuello), dorsal (espalda) o lumbar (parte inferior de la espalda o cintura). El dolor puede originarse en eventos agudos como traumas o en procesos crónicos como la osteoartritis y por el envejecimiento normal que acompaña a la edad avanzada.
El bloqueo facetario se puede realizar introduciendo la punta de la aguja en esta articulación o aplicando el medicamento cerca de ella, sobre el nervio encargado de la trasmisión del dolor.
Se deben considerar en dolor de la parte inferior de la espalda referido a las caderas, región inguinal o a los miembros inferiores sin sobrepasar las rodillas y que se intensifica con ciertas posiciones como agacharse, incorporarse de la silla o de la cama y permanecer mucho tiempo sentado o de pie. En el cuello se debe considerar cuando el dolor tiene varias semanas de evolución y se intensifica con la movilización hacia adelante, atrás o hacia los lados.